el cielo nos condiciona

las cosas me pesan, todo me pesa bastante, hasta me cuesta escribir con el teclado,
no estoy a la altura de este dia o quizas pueda estarlo, pero me di cuenta que cabe la posibilidad de no estar a la altura de un dia como hoy, bellisimo, demasiado bello, no combina con nuestras intensiones, yo miro ese cielo despejado del mediodia, los rayos de sol que entran por las ventanas del colectivo potentisimos y encandilantes tanto que no me dejan leer el libro por momentos, entre tanto miro a la gente que, por partes muy iliminadas sobre su cuerpo, tampoco se dejan ver completamente.
entonces, cuando percibo esto, me doy cuenta que necesitaría que todo lo que me pase hoy sea maravilloso.

haría un millón de cosas como ir a la playa por ejemplo, a veces sueño con escaparme de la ciudad,
entre ayer y hoy recibí cosas materiales que me hacen feliz: una cama con cajón para poner la ropa, un colchón de resortes, una bicicleta olmo playera muy fuerte que compró mi papá por 300 pesos (extraño a mi papá), una computadora para mi sola en el entrepiso, donde estoy sola en la oficina, y el libro de tracy emin que me prestó cande, POR NADA DE ESTO YO PUSE PLATA
somos humanos y las cosas materiales nos hacen felices
acá dice luisa delfino en el twitter que nos alimentomos de luz al menos diez minutos por día. la empecé a seguir porque me pareció simpático seguirla, pero ya se está volviendo insoportable, no necesito toda esa parafernalia new age para darme cuenta que me hace bien el sol, lo hago por instinto
a veces uno detesta la ciudad, pero hay otras veces que pienso si no viviera acá adonde lo haría?
el caos y la variedad me calman todavía,  todavía debo ser joven, quizás sea joven toda la vida y necesite siempre del caos para alimentar mi existencia, hay gente que no crece


esta materialidad me hizo acordar cuando mi mamá me llevo a su pieza y me dejo ver atras d ela puerta donde tenia la xuxa gigante para mi, fue increible lo que senti, nunca mas volvi a sentir tanta emoción

me levantaba sola en la cama grande de mi bisabuela, pasaba por el baño, la sala de estar y finalmente llegaba al comedor diario, donde estaban mi bisabuela, y sus nietas adolescentes, todos riéndose a la mañana, ellas siempre se reían  se llevaban un año y durante toda mi infancia estuvieron en la edad del pavo, a veces sentía que se reían de mi.
me decían buen dia y mi bisabuela me daba un mate con liquido blanco, la primera vez me resistí  yo odiaba la leche y en el mate me parecía mas asqueroso aun, pero ella insistió y fue una de las cosas mas ricas que probé en mi vida, después nos sentábamos las cuatro alrededor de la mesa, en la sillas con almohadones de cuerina roja a desayunar contundente, mate cocido con leche y tostadas con manteca y dulce casero, hacia frio el el sol entraba por el ventanal del comedor diario, el ruido de la hornalla sonaba cuando había algún silencio, yo admiraba un poco a mis primas, eran castaño claras y compañeras, lindas. en sus casas tenias cajitas llenas de bijuterie, yo cuando iba las revisaba por completo cuando nadie me veía  el padre era el pintor mas prestigioso del pueblo y en el living arriba del hogar tenia una pintura de la chica afgana con cara de susto de ojos verdes, pintada con muy buena técnica me quedaba hipnotizada mirándola cada vez que iba. abajo de un sillón de ladrillos tenían un tesoro, unos muñecos estilo playmobil, pero otros, seguro los habían traído de algún viaje a españa, yo cada vez que iba le pedia a mi tia abuela que los saque, pero ella no quería  me metía bolazos, creo que me boludiaban bastante. eran gente muy católica, la familia nuclear estaba compuesta de siete personas, dos adultos, la hermana de mi abuela, su marido español, dentista y pintor y sus cinco hijos, de los cuales quedaron cuatro porque a uno lo mató un camión en la ruta cuando se iban de vacaciones a la playa, era el segundo, una historia horrible, yo no lo conocí, después de eso quedaron ellos seguramente bastante traumados y mas aferrados al catolicismo que nunca, algo escondían, cierta maldad, cierto desprecio a todo lo que no sea ellos, cierta burla.
a veces íbamos con mi mama en el 147 azul a quedarnos o a saludar, si hacia calor nos sentábamos en la vereda.
un día mamá solo pasó a saludar y yo me quedé en el auto, cuando volvió a subir me dijo "chiquita va a volver a votar a menem" y no dijimos mas nada.

cada vez me cuesta mas relacionarme con mis familiares, hoy tenia la oportunidad de ir a dos almuerzos, ya que estaba en lobos, uno con la familia de mama y otro con la de papa y me quede sola, en mi casa, con una resaca grande, mirando desde la cama materna una película sobre picasso, en general no puedo mirar películas porque soy muy ansiosa, pero se ve que la resaca me permitió concentrarme, no estaba mal, me hizo acordar un poco a viky, cristina, barcelona, la forma en que ven los yankis a los españoles, les parece algo muy pintoresco y degenerado aparentemente, que película rara esa de woody allen, primero el hecho que tenga dos nombres y un tercero de ciudad despues de coma me parece desconocimiento del código lingüístico sobre el idioma del lugar que trata la película y por lo tanto perdida de interes para los hablantes del mismo, quizás es mejor que los directores dirijan en sus paises, que traten de reflejar su cultura, no la de otros, como coppola que vino acá y mando cualquiera con ese película ridícula y vergonzosa. yo prefería que vicent gallo no intentara nunca hablar en español, que se quede ahí, en ese película con cristina ricci.

me siento grande
me visto con camisa de seda, pantalón negro y zapatos, me siento grande
estoy sentada frente a una pc 0km, mirando por la ventana, inmensa,
en plena capital, se ven animales
un poco mas lejos un edificio raro, mas horizontal que vertical
y un poco mas lejos aun, edificios normales de buenos aires,
torres amarillo patito con detalles en color rojizo, con antenas en la terraza
y un cielo gris de fondo
buenos aires normal

pájaros muy cerca que no se los nombres
vegetación mesopotamica, al final
en frente parece haber una central eléctrica
no entiendo este barrio
no me suena familiar
es como una zona industrial pero de empresas
no llegan los colectivos, tenes que caminar

hola, vengo a comunicarme con los demás, intento hacer la mayor cantidad de cosas,  no quiero que se me pase la vida, si se va quiero que me agarre en movimiento, no creo que mis pulmones estén en su máximo esplendor, mucho humo, 
como dijo una vez juan bauer en uno de sus poemas, todo es por ansiedad
hoy fuimos a buscar cosas al ex local de la mama de sergio, nos vinimos bajo la lluvia ocho cuadras por wilde arrastrando dos sillas de escritorio con dos bolsas negras de consorcio llenas de almohadones, sumado a una caja de herramientas en una y telas en otra, 
la lluvia no estaba fría, ademas es feriado y no importa mojarse, volves al hogar a secarte
si puedo voy a escribir un cuento, ya tengo la historia y el tìtulo, "El engaño de Ricky"
también trajimos un mate y un termo, el mate es el que siempre soñé, un zapallo de los abiertos con base, pero chico, no para mucha yerba, ya que como acá tomo mate sola, me molesta gastar casi cuarto kilo de yerba para tomar dos mates.